TRAGALUZ

Sea en el Boulevard de Asia o en el Hotel Belmond de Lima, Tragaluz tiene como evidente común denominador un esmerado esfuerzo por reservar varios metros cuadrados al aire libre. Las terrazas que se ofrecen en ambos restaurantes son un spot ideal para amenas reuniones de mediodía o media noche. La propuesta en el bar de Lima se ha hecho tan conocida que se ha convertido en el point elegido para la mayoría de los eventos de la ciudad, mientras que en el sur las luces tropicales crean una atmósfera genial para “los previos” de verano.

LA73

El panorama barranquino no sería lo mismo sin la terraza de LA73. Este restaurante que se autodefine como “Paradero Gourmet” se ha institucionalizado en Barranco gracias a sus celebraciones de año nuevo chino y a su inconfundible carta renovada por temporadas. La fachada de esta terraza parece un anexo del restaurante pues los mozos deben cruzar la vereda de la Av. El Sol Oeste para transportar las delicias que salen de cocina. ¡Con solo 10 mesas este espacio tiene vida propia! Aunque la terraza sea por costumbre un espacio preferido en verano, este lugar desconoce las estaciones y se le encuentra con buena afluencia también en invierno. No se vaya de ahí sin probar los churros de manjar.

BARRA VERDE

Con pocos meses funcionando, Barra Verde se instala en el último piso del Concept Store Morphology. Este espacio se define como un restobar orgánico y el diseño del mismo es una oda al espacio por el espacio. Su carta ofrece una propuesta con productos que provienen del mismo huerto y ya van un año montados en esta aventura. En lo que parece uno de los primeros lugares “farm-to-table” de Lima, utilizan solo vegetales cultivados en su huerto en Pachacamac y cuentan con la certificación Serres Ltda. para ello. Cada jueves tienen un show llamado “Dance with butterflies” en donde una bailarina usa telas para elevarse junto a las mariposas de su ya famoso mariposario.

DÉDALO

La terraza de Dédalo parece contar con un código tácito de respeto al silencio y a la tranquilidad. Aunque para quienes viven por la zona es imposible perderse las noches de música en vivo y pizzas que se prenden solo los miércoles, siempre es posible pasar una tarde cualquiera a leer un libro, comprar arte y tomar un café rodeado de vegetación. Es el lugar perfecto para almorzar un menú que se siente casero y la carta presenta varias opciones veganas.

EPICERIE DASSO

Comer al aire libre brinda una sensación especial y distinta de hacerlo todos los días dentro de casa o en restaurantes. Para todos los que se quejaban de que en Lima había pocas terrazas, llegó Epicerie Dasso. Sus 4 mesas ubicadas en el cruce de la Calle Miguel Dasso con Leónidas Yerovi, son el justo medio para los vecinos de la zona que buscaban algo esmerado pero casual. Disfrute de un bowl de açai, jugos naturales, excelente café, ensaladas, vinos y los quesos más selectos de esa cuadra. Este deli es todo lo que ha estado esperando.