Por Margite Torres Postigo

Santiago Mayorga no es solo uno de los jóvenes enólogos más reconocidos de la Argentina, sino un excelente profesional que desborda elegancia en su pasión: el vino. Sus creaciones llevan su huella muy marcada y a donde las comunica son el fiel reflejo de aquel vínculo que formó con el viñedo desde niño, y de su dedicación hace casi 10 años al mando de una de las bodegas argentinas más prestigiosas como Nieto Senetiner y luego Cadus Wines.

“Santi”, como lo conocen los amigos, fue elegido en 2019, en el marco del 50 aniversario de The Future 50 Awards, como uno de los 50 personajes (menores de 40 años) más prometedores del mundo el vino. Con estos premios The Wine & Spirit Education Trust (WSET) y la International Wine & Spirit Competition (IWSC) buscan identificar la nueva generación de los mejores expertos en vinos y licores; así se convertiría en el único enólogo argentino en haber obtenido este reconocimiento. Desde hace unos años ya viene pisando fuerte y los grandes no solo ya lo notaban, sino que lo premiaron por hacer lo que más le gusta. 

Santiago dio sus primeros pasos al lado de su padre, quien también es ingeniero agrónomo y a quien acompañó desde chico a los viñedos. Estamos seguros de que a esa temprana edad comenzó a forjar lo que ahora es su pasión y que fue de él de quien heredó su afán por cuidar la uva desde el viñedo, por buscar el mejor terruño para ella y de potenciar sus cualidades para ofrecernos los caldos que hoy elabora.

Su pasión lo lleva a viajar mucho, pero siempre se da un tiempo para su otra gran adoración, su familia. Es entre ellos donde se le ve feliz también, siempre cerca de la naturaleza, más relajado entre amigos y cabalgatas. Y seguramente, son ellos quienes más aplauden sus logros, además de quienes lo estimamos y gustamos de sus vinos. En el 2016 fue incluido entre los “10 Winemakers to Watch” en la edición sudamericana de Decanter y la revista Wine Enthusiast lo eligió como uno de los enólogos de la “New Generation”, que marcaban el rumbo del del vino argentino. Dos años después, llegaría el reconocimiento del crítico de vinos Tim Atkin en su informe anual sobre Argentina, como “Young Winemaker of The Year”. 

Es difícil hablar de Santi y no mencionar el fruto de su trabajo, que no son solo los vinos, sino también los premios y las luces que el mundo pone sobre él. Creemos que no son más que un resultado de ese crear vinos con dedicación y compartirlos con el mismo afán que él lo hace. Elaborar vino es un arte, de eso estamos convencidos y Santiago es de esos “artistas” que ha sabido conectar con la historia detrás de ellos. Por eso lo reconocemos como un creador de vinos de autor; su sello, muy particular, se distingue, y resalta. A algunos puede resonarles a otros no, pero lo más importante es que son vinos con personalidad, valorados por su gran calidad y elegancia.

Bonus:

Cambio de look, misma esencia

El 2020 no fue solo un año de pandemia, sino de muchos cambios para Nieto Senetiner y para Cadus, que atravesaron un rediseño del espacio y de todas sus etiquetas. “En Nieto trabajamos sobre 3 pilares fundamentales. Por un lado, la importancia del movimiento, de no quedarse quietos, de hacer siempre nuevos descubrimientos y vinos nuevos. Por otro lado, la importancia de las regiones y del cuidado de las uvas patrimoniales. Así que hay un gran trabajo en Nieto Senetiner”, comenta Santiago. 

Vinos de Nieto Senetiner

Hay muchas cosas nuevas por contar, desde una nueva línea Patrimonial, donde se pone el acento en el trabajo con cepas históricas de Argentina (Malbec D.O.C., Bonarda, Criolla Grande y Semillón), buscando volver a ponerlas en valor, hasta el primer vino certificado orgánico de la bodega. Don Nicanor Malbec Orgánico 2020. A esto se suma el nuevo lanzamiento, (que aún no llega a Perú), de Villa Blanca Estate Malbec, un homenaje al viñedo más antiguo de la bodega plantado en Vistalba en 1888. Y en Cadus, que es más un “proyecto de vinos de exploración” de los diferentes terruños de Mendoza, como lo describe el propio Santiago, se apunta más a un rediseño enfocado en el trabajo con la diversidad que tiene Mendoza. Finalmente, el enólogo anuncia la llegada de Cadus Assamblage, un corte de diferentes variedades que reemplaza al clásico Blend de Alturas.