En los últimos cuatro años, hemos venido experimentando el ingreso al mercado limeño de vinos procedentes de regiones en las que poco se conocía de su producción, como Tacna, Moquegua y Arequipa. Sin embargo, la historia del Perú virreinal nos cuenta que estas zonas alcanzaron importantes niveles de productividad, comercializando sus excedentes fuera de sus fronteras, inclusive, amenazando las importaciones de vinos de España. Hecho por el que los comerciantes ibéricos solicitaron la intervención de la corona, logrando el decreto real que prohibía la exportación proveniente de Perú. Sin embargo, esto no duraría mucho tiempo y, en su lugar, se establecerían impuestos a la producción.

Por: Pedro Cuenca/sommelier profesional

¿Con qué uvas se elaboraron esa alta producción de vinos?

La primera uva traída por los españoles, según diferentes fuentes históricas, es la “Listán prieto”, conocida en la actualidad como ‘Negra Criolla’ en Perú, “País” en  Chile y “Criolla chica” en Argentina. Después, uvas como “Moscatel” de Alejandría -conocida como “Italia” en nuestro país-, la Mollar, la Albilla se sumaron a nuestro patrimonio vitivinícola; hecho por el que se les conocen como uvas patrimoniales. Si bien, en la actualidad, estos tipos de uva se le atribuyen al mundo del Pisco, en un inicio, fueron usadas para elaborar vinos y su cultivo ocupaba diferentes zonas de la franja costera sur del Perú.

Según el ingeniero Karl Mendoza, experto en el tema, las variedades patrimoniales se clasifican en dos grupos: las uvas tradicionales, a las que pertenecen las mencionadas anteriormente, y las uvas criollas, en las que se encuentran nuestras peruanísimas Quebranta y Torontel. Sin embargo, la lista no termina ahí. De pronto, en algunas zonas, como en la provincia de Caravelí, aparecieron uvas como la Jaén, la Cantarita y la Ceniza; con las cuáles se vienen elaborando vinos singulares bajos métodos tradicionales. Donde las antiquísimas tinajas son las protagonistas en el proceso de vinificación. Mientras que, en otras zonas productoras, variedades como la Moscatel, Italia rosada y la Italia negra empezaron a ser cada vez más usadas en la vinificación. 

Sin duda, esta nueva ola de vinos peruanos, de pequeña producción en zonas históricamente productoras, nos trae interesantes opciones de vinos secos: tintos elaborados con Negra Criolla, rosados de Quebranta y blancos de Italia, Albilla y Torontel. También, algunos otros elaborados con Mollar, Cantarita y Jaén que debido a su color peculiar, no encajan en la definición de lo que sería un tinto o rosado. 

Otro punto a destacar, es que muchas de las bodegas que actualmente están apostando por la producción de vino con uvas tradicionales y/o criollas tuvieron sus inicios en la elaboración de pisco y de vinos dulces realizados con variedades no viníferas. Y, ahora, encontraron una oportunidad para ampliar su portafolio de productos y darle otro uso a las variedades pisquera, permitiendo su crecimiento en hectáreas de cultivo. 

Es así que que bodegas como: Finca Maravilla, Viñas del Marques, Santa Elena, Viejo Molino, Hacienda del Abuelo, Majes Tradición, Acapana, Buen Paso, Camaná, Why Not?, Pampas de Ica, Murga, Villacurí, Mi Rosedal, Viña Los Reyes, Viña D’ Los Campos, Santa María, RAS y Flor de Lis empezaron a tener más notoriedad en el competitivo mercado limeño.

Finalmente, el valor agregado que estos vinos le suman a nuestra reconocida gastronomía es su singularidad, valor histórico e identidad; lo cual, es una tendencia en los países productores de nuestra región, en donde se busca recuperar y valorizar las variedades patrimoniales.

Recomendaciones: 

Flor Rey y Joseph Ruiz, distinguidos sommeliers locales, apuestan por lo local y nos revelan su ranking de los mejores 5 vinos made in Perú. ¿Ya los probaste? 

Top 5 – Flor Rey / Head Sommelier Maido

Bodega Murga / Joyas de Murga Quebranta 2019

Este proyecto, dirigido por la enóloga brasilera Pietra Possamai en el Valle de Pisco, Ica, ha demostrado que se puede hacer vinos con uvas autóctonas tradicionales pisqueras.

Este fue un vino de un lote muy pequeño que lo tuvimos para un maridaje en Maido. Es super fresco, con buena acidez, seco. Tenía un sutil color rosado amarillento hermoso, sin filtrar. Con notas a membrillo y algo de bergamota. Elaborado de Quebranta y Mollar.

Bodega Pampas de Ica / Pampas de Ica Blanco Patrimonial 2018 – Albilla y Torontel

Viene del Valle de Ica, del sector Pampas de los Castillos, distrito de Santiago. Un vino de producción limitada, que muestra uvas del lugar. Presenta notas a pieles de cítricos, algo de manzana verde, durazno blanco. Es un vino sutil, de gran versatilidad para acompañar diferentes tipos de platos.

Viña Vieja / Finca Rotondo – Chenin Blanc, Sauvignon Blanc 2020

Viñedos ubicados en Chincha. Un vino muy fresco, de acidez alta, pero que no incomoda. En nariz, notas de la lima, toronja amarilla, flores blancas, piña no tan madura, al final una expresión herbal delicada.

Viña D´los Campos / Raíces Negras – Cabernet Sauvignon 2019

Proviene del viñedo Nuevo Imperial en Cañete. Es un Cabernet Sauvignon muy amable, de taninos medios, equilibrado. En boca, notas a frutas negras como bayas y pasas.

Viñas Queirolo / Intipalka Cabernet Sauvignon – Petit Verdot 2019

Viñedos ubicados en la zona de Ica. Acá te encuentras con un vino fresco, afrutado, de taninos suaves y más estructurados en boca, que ha pasado por un período corto de 6 meses en barricas de roble francés y americano. Notas a ciruelas, fresas, algo de cassis más madura. En el final de boca algo de cacao.

Top 5 – Joseph Ruiz / 3 veces Mejor Sommelier del Perú

Finca 314 / Mistela Rosa Victoria

Mezcla de Mostos de uva Italia y Quebranta, fortificado con pisco Quebranta. Posee un dulce equilibrado y buen aguante después de abrir; se puede hasta usar en coctelería.

Viña Tacama / Ambrosía Rosé

Una mezcla de uvas con mayor porcentaje de Nielluccio que es sinónimo de Sangiovese en Italia. Uno de los mejores rosados peruanos (si no el mejor), que he probado. Equilibrado, seco y con buena persistencia. Versátil para acompañar varios tipos de comida.

Viñas Queirolo / Intipalka Reserva Cabernet Sauvignon, Petit Verdot 2019

Una propuesta del nuevo enólogo Luis Gómez. Es un vino jugoso, con mucha expresión de frutas negras y muy bebible, todo un cambio de estilo de este vino.

Viña Los Reyes / Alvarado Reyes, Cabernet Sauvignon

Proveniente de viñedos de Lunahuaná, mezcla de añadas que lo hacen más complejo en nariz y en boca. Con notas de especias dulces y vainilla, taninos sedosos y presentes, equilibrado y con una sutil nota evolutiva.

Bodega Viejo Molino – Negra criolla

Vino de una variedad representativa del sur como lo es Moquegua. Con notas a frutos del bosque, acidez presente y taninos suaves, rústico, pero a la vez complejo en su simple proceso de producción. Un vino que viene dando qué hablar, amigable y de producción pequeña.