Entre octubre y noviembre del año pasado, Lalá abrió sus puertas en Miraflores para satisfacer a los diferentes tipos de paladares limeños con sabores locales y platos del mundo. Como nosotros seguimos celebrando el Mes del Malbec, nos dimos un salto por ahí para conocer un poco más de este lugar-, que se ha convertido en una de las terrazas más “chics” de Lima-, en busca de algunos platillos que acompañar la cepa insignia de Argentina, que sigue de agasajo.
Lalá es un lugar abierto, amplio, verde y acogedor; un espacio para disfrutar de un desayuno en grupo, como también de un after office. Nada que decir para un almuerzo de esos familiares o con muchos amigos: sus amplias mesas te invitan a probar su carta, que cuenta con abrebocas, entradas, arroces y pastas, fondos, pizzas y otros que sugiere la casa, a cargo del chef Umberto Salini.
“Somos una propuesta ecléctica. En Lalá, básicamente, hacemos fusión, pero el espectro es muy amplio. El único detalle que tenemos acá es que si está rico y delicioso, puede entrar en el menú. No hay mayores restricciones con eso. Somos un restaurante grande, entran más de 100 personas. Es por eso que puedes venir a desayunar, almorzar y cenar sin repetir los platos por unos 15 o 20 días“, comenta el chef.
En el menú la cosa es bastante variada como comenta Salini. Y así lo comprobamos al probar y degustar los platos de la carta en busca de algunos maridajes que recomendarles si desean darse una vuelta por Lalá. Estas fueron las elecciones del chef:
1. Como abrebocas, croquetas de hongos, elaboradas con champiñones y portobellos cocinados en crema de leche. Muy crocantes y acompañados con alioli. Para maridar, sugerimos Paula de Doña Paula. Un vino de color rojo violáceo intenso, que presenta notas de frutos rojos, aroma dulce y especiado que combinan muy bien con este platillo.
Vitorria, Paula y croquetas de hongos, en Lalá.
2. De fondo, el chef propone el concolón amazónico; un arroz hecho con cecina ahumada de la selva. Este platillo es servido con una chalaca de cocona y aceite picante de ají charapita. El estilo de su presentación se asemeja al de una paella, por lo que encontrarás arroz tostado al fondo. La versatilidad del Malbec nos da la ventaja de combinarlo con un Vittoria Reserva Malbec de bodega Tabernero que destaca en nariz por sus aromas a higos y damascos secos. En boca tiene sabores a guindones y caramelo. Taninos finos y elegantes, dejan sensaciones de suavidad y redondez en el paladar.
3. Otro de los platos que sugiere el chef Salini es el pollo asado, donde utilizan pollito bebé cocinado con hierbas y servido con puré de papas (una especie de mil hojas) y su jugo. Se presenta sobre una cama de romero y tomillo para conseguir un tono ahumado especial. Si seguimos en la línea de las carnes, la carrillera braseada también es una buena opción. Cachete de res braseado en vino tinto y vinagre balsámico, acompañado de zanahorias glaseadas en miel y una ensalada fresca. El vino elegido para acompañar estos platos es el Gran Sombrero Malbec de Huentala Wines. Un vino color rojo violáceo profundo, donde destacan las notas a ciruela negra y moras, con un toque especiado, que recuerda su paso por barricas de roble francés. En boca es equilibrado, con taninos dulces, amables y envolventes.
Redacción Sommelier
