Por Vanessa Rolfini

Jhosseline Benites es la primera campeona nacional de barismo de Perú. Lleva cinco años ejerciendo el oficio desde la barra de Orígenes Tostadores de Café en Pueblo Libre, Lima. En la final del campeonato, recientemente llevada a cabo en el contexto del Ficafé en la ciudad de Ayacucho, se alzó como ganadora; dentro de otro hecho significativo, los primeros tres lugares fueron ocupados por féminas, resultando Jeraldine Torres y Diana Landeo, en el segundo y tercer lugar respectivamente. 

La barista hace énfasis en que gran parte del éxito de su trabajo radica en escuchar a los clientes, aconsejarlos y apoyarlos, pero no imponerse. “El objetivo siempre es que disfruten e incentivar el consumo de buen café peruano. En mis años frente a la barra veo cómo han ido cambiando los gustos y cada vez los clientes piden más métodos como Chemex y V60, también muestran más interés sobre la procedencia del café, cómo lo han procesado”, apunta. Cuando se le pregunta cuántas tazas prepara a diario, en promedio señala que alrededor de 60, lo que lleva a un cálculo de 9 mil tazas anuales, considerando 6 días de las 52 semanas que tiene un año. Ni qué decir, si esto se multiplica por cada año que lleva en el oficio.

Entre las recomendaciones que ofrece, invita a beber el café sin azúcar ni otros endulzantes para apreciar las notas de sabor que arroja el café peruano. Pero pone un acento especial en el tema de la temperatura de la bebida, “los capuccinos no deben estar tan calientes, lo ideal es a 70°C que permite apreciar el sabor del café”, explica. Además, sugiere que cuando se usa leche entera, si se trabaja de forma correcta, la crema que se forma le suma más gusto a la experiencia, porque añade a la bebida más notas de sabor.  Agrega que, si se toma lentamente, también se disfruta aún más el cambio en la textura cuando se está tomando.

En el caso del café espresso, resulta enfática al señalar que no se trata de un americano, tal vez uno de los más solicitados en la barra y se lo hace saber a los clientes, porque de vez en cuando se generan confusiones. Aconseja que, sea cual sea la preparación de café que pidamos, preguntemos su origen. 

Dos primeras veces

Jhoseline Benites se entrenó por más de cuatro meses para su primera participación en un campeonato nacional, donde se hizo acreedora del primer lugar. En su caso escogió un café tipo Geisha con proceso anaeróbico, de un productor de Quellouno, Cusco. 

De voz dulce y pausada, da la impresión de que no pierde el control. En su participación en la final, paso a paso explicó nítidamente el entramado técnico para llevar a cabo su bebida de autor, a la que llamó “Evolución”, porque “todo este proceso para mí ha sido fuerte. En estos meses he evolucionado mucho no solo en mi forma de trabajo, sino en mi manera de apreciar más el café. He aprendido bastante, he mejorado cada etapa. Me ha costado”, afirma con aplomo y emoción, además deja claro que ha sido un trabajo de equipo, donde todos los aportes han sido importantes para alcanzar este logro.

La competencia mundial donde representará a Perú se llevará a cabo en Grecia, en junio de 2023. Mientras tanto sigue en su barra día a día, sonriente, aplomada, presentando un buen servicio.