Por Vanessa Rolfini @rutasgolosas
“Esta tercera versión de Alquimia en Carnaval Bar es la mejor”, expresa el bartender Aaron Díaz, a propósito de la nueva carta que le ha tomado un año de reflexión, pruebas, ensayos, imaginación, sueños y exploración; ingredientes que siempre han conformado su propuesta de coctelería, que se ha hecho distintiva por colocar los conceptos clásicos de cabeza, pero respetando sus principios.
La barra de Carnaval Bar abrió hace cuatro años, cada día a las cinco de la tarde y desde esa hora el bar está a casa llena. Allí confluyen los amantes de las bebidas, desde los más clásicos que se decantan por un buen escocés, una copa de vino o una cerveza, hasta los amantes de los cocteles, que es un mundo donde los gustos son infinitos. Lo que todos tienen en común al entrar al lugar es su promesa de que “nada es lo que parece”, lo cual no es solo letra impresa, sino una realidad que reta los sentidos y divierte.
La carta lista cocteles clásicos y las creaciones de Díaz y su equipo, que en todos los casos se caracteriza por el uso de etiquetas de primera calidad, atención extrema a los detalles, desenfado, diversión, técnica y es el único bar que pone énfasis en la calidad del hielo, al punto, que tienen una habitación dedicada por entero al tema, lo que lo convierte en un ingrediente más.
Alquimia III es “nuestro estilo”
Entre las novedades de Alquimia III, la sección “Carnaval a la Carta” la conforman diez opciones donde es difícil decidirse, pero destacan el Bijou, basado en el clásico elaborado con gin, vermouth y chartreuse, pero con el toque innegable de la casa que se distingue por una apariencia colorida, tal como expresa Díaz, “si vienes pensando que conoces, te encontrarás que luce como no esperabas, que el sabor se parece al que conoces, pero no lo es. Reinventamos los cocteles a nuestro estilo”.
Otras alternativas en esta sección de la carta son el humeante Dark & Stormy con ron, cerveza de kion, y banana, el Last Word con gin y chartreuse, el French Connection elaborado con coñac, amaretto y fino de jerez. También se destacan el Zombi que mezcla ron, maracuyá, granada y el caribeño falernum. Una recomendación es el que lleva el nombre de la casa y por lo tanto su coctel insigne, Carnaval, que lo integran gin, chartreuse, cerveza y limón criollo, cuya presentación ilumina la mesa.
El martini en Carnaval parece que expande sus límites, y aparece en versiones como espresso, breakfast, pornstar y dirty, a lo que se puede sumar su versión más clásica, que siempre tendrá un elemento distintivo. Otro servicio que no se puede pasar por alto es la selección de mezcales y tequilas servidos en una calavera, acompañados de un grupo de sales y citricos.
A la vena
Para establecer la nueva propuesta, Díaz narra que siempre cree en la magia que transmite la atención a los detalles, porque los cocteles son tal vez el lugar donde se expresen mejor las particularidades de los comensales, quienes puede compartir el piqueo, pero no el trago y cada quien pedirá de acuerdo a su deseo, estilo y gusto. “Por eso el bartender pregunta, hurga en las preferencias para dar en el clavo y responder con acierto. La instrucción para el equipo es que no podemos fallar en eso. La información nos enriquece”.
La carta cuenta con una sección de vinos y cervezas, que se perfila como una verdadera curaduría, que mantiene una línea conceptual con los cocteles y el piqueo, donde destacan las hamburguesitas que siempre han estado en el menú, a lo que se suman la tortilla española con prosciutto y pimiento, los capeletti trufados y los snacks del bar, en una combinación de queso Manchego, prosciutto, coppa, aceitunas crocantes y chips de papas andinas.
Aaron Díaz afirma que después de cuatro años, cada vez tiene que explicar menos lo que hacen en Carnaval Bar, los clientes habituales o no, confían en la propuesta. Por otra parte, el equipo ha afianzado la dinámica, madurado y tiene más confianza. “Ahora no tengo que convencer que hacemos las cosas bien, el público simplemente disfruta la experiencia”.
Dirección: Pardo y Aliaga 662, San Isidro.
Instagram: @carnavalbar
