Hay dos destinos colombianos que se han convertido en los favoritos de miles de turistas, pues cuentan con dos maravillosos elementos que hacen que uno viva una estadía perfecta: sus incomparables playas bañadas por el cálido mar Caribe, y sus tradicionales calles y arquitectura colonial llenos de belleza e historia.

Cartagena, es sin duda una de las ciudades más hermosas de Sudamérica. Es imposible no quedar admirado por sus encantadoras viviendas de intensos colores, sus playas de ensueño y por sus esplendorosos carruajes que recorren los lugares más emblemáticos de esta ciudad, como la Plaza del Reloj, uno de sus principales atractivos turísticos que se ubica en el corazón de Cartagena.

Su centro histórico está rodeado por varios kilómetros de sólidas murallas que fueron construidas durante la época colonial para la defensa de la ciudad y que ahora son recorridas cada año por miles de turistas. Desde ellas se puede observar como el mar Caribe acaricia la privilegiada costa de Cartagena. Otra visita obligada es el imponente Castillo de San Felipe de Barajas construido en el siglo XVII, y en cuya cúspide se puede apreciar un paisaje espectacular de esta ciudad que fue declarada por la Unesco como Patrimonio Histórico de la Humanidad.

El arte y las variadas ofertas turísticas conviven en perfecta armonía con la historia que se respira en sus calles, y lo mismo sucede con la gastronomía. El restaurante Candé invita a saborear sus exquisitos platos típicos cien por ciento cartageneros en el que se usan insumos como el pescado, los mariscos, el coco y el plátano. En tanto, el Celele ofrece al turista una oferta gastronómica más contemporánea, pues cautiva al comensal con una fina presentación de sus platillos, y con una explosión de sabores caribeños en el paladar. Otra parada de rigor es la Hacienda San Alberto que ofrece al visitante una imperdible cata de café. Y para finalizar con broche de oro la visita a Cartagena, uno puede aprender a mover las caderas en el Crazy Salsa.

Muy cerca a Cartagena, a unas cuatro horas en bus, se encuentra Santa Marta, otro tesoro colombiano que encandila a los turistas con su tradicional arquitectura y la belleza de sus playas. Pero antes de llegar a este destino, se puede hacer una parada a medio camino en el Sombrero Vueltiao, un curioso restaurante de Barranquilla que llama la atención debido a que tiene la forma del típico sombrero colombiano.

Santa Marta, la ciudad más antigua de Colombia, cuenta con un bien conservado Centro Histórico en el que se encuentra la Catedral, antiguos edificios de valor patrimonial y unas casas cuyos balcones se roban las miradas de todos los visitantes. También es ideal hacer un paseo por el impresionante puerto de la Marina de Santa Marta y el Malecón Bastidas, en el que se puede apreciar toda la belleza y grandiosidad del mar Caribe.

A unos 34 kilómetros de Santa Marta está el Parque Nacional Tayrona, un paraíso que todo viajero debe descubrir. Esta joya de la naturaleza cuenta con una exuberante selva tropical y con mágicas playas bañadas por las aguas turquesas del mar Caribe. Aquí se pueden practicar una serie de actividades como el buceo y el snorkel que permitirán conocer su exquisita riqueza marina.

Las actividades nocturnas también cobran vida en Santa Marta. El Parque de los Novios y sus alrededores cuentan con una gran oferta de bares y restaurantes que vibran al son de la contagiante música de este lado de El Caribe. En definitiva, una experiencia de viaje que extasía cada uno de los sentidos del viajero.

EL DATO:

Cartagena y Santa Marta son dos destinos que nadie debe perderse y para ello Viva Air ofrece pasajes a estas ciudades desde 170 dólares. Esta famosa aerolínea colombiana low cost permite viajar con un modelo a bajo costo, eso significa saber seleccionar los servicios que el viajero requiere y pagar únicamente por lo que se necesita. Además, Viva Air ofrece diversos horarios de vuelo hacia estas fabulosas ciudades colombianas. Para mayor información ingresar a su web y redes sociales:

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NDP