En la Picantería Alegría te reciben con “un cariño”, es decir, chifles hechos en casa y un shot de leche de tigre caliente, que puede ir acompañado de un Clarito bien helado; lo que resulta la mejor señal para lo que será una experiencia con toda la calidez del norte del Perú, pero, en el centro de Miraflores. Al frente, el chef piurano Francesco De Sanctis, quien finalmente materializó su deseo de ofrecer esa cocina con la que creció, los sabores de su tierra, con los cuales ya había coqueteado desde la cocina de Síbaris, pero ahora son el centro de la propuesta.
Por Vanessa Rolfini Arteaga / @rutasgolosas
Alegría tiene esa sustanciosa sazón norteña, pícara, fresca y compleja, que cualquier peruano puede identificar fácilmente, pero en este caso, servido con más sofisticación, en un espacio iluminado, fresco, que sin llegar a ser informal transmite cierto relax al comensal, quien puede comenzar con un refrescante jugo de tamarindo o de mango ciruelo, o alguno de los cocteles de la carta como La Pespita que consiste en Limoncello, con limón rugoso, Prosecco y agua gasificada.
“El sabor es fiesta, sebiche y chicha de jora compartiendo en una mesa, el alma alegre se aflora”. Alguna de las frases que se leen en el restaurante y comparten la esencia del lugar.

Leche de tigre, picantería Alegría – Foto: Jimena Agois
Para irse bien satisfecho
“La recomendación es comenzar con un ceviche, en el caso de los piuranos, se caracterizan por ser muy limpios, directos y puros, con solo pescado de la mejor calidad como Mero o Charella, zumo de limón, ají limo y cebolla”, nos dice el chef. El cual acompañan con yuca, sarza criolla y zarandaja. Resulta un plato que te hace sentir en casa, donde lo sabores están deliciosamente equilibrados. Otra versión muy popular entre los comensales es el de las cochas negras, que lo sirven con las mismas guarniciones.
Otra manera de empezar es con unos tamales verdes, elaborados con choclo tierno, que resultan suaves y se pueden comer con cuchara o tenedor, los cuales bañan con la salsa de seco de cabrito, que lo convierte en un manjar muy goloso. Que si va acompañado de una chela bien fría le sube el volumen a la experiencia. Pregunten por la papa a la huancaína en bola, inspirada en la que venden afuera de los colegios piuranos y la causa de cangrejo.
“Aquí la comida canta, y el alma se hace festín, un plato con alegría y una chicha hasta el fin”.
Para quienes van por primera vez, el chef recomienda el seco de Chabelo a base de plátano verde y carne seca elaborada en la picantería y el majado de yuca con cerdo frito como un chicharrón.
Dos platos de fondo que también se destacan son el seco de cabrito donde la carne se desprende del hueso, cocido con chicha de jora, cebolla y culantro, acompañados de frijoles y arroz blanco. La otra opción enfocada más en el mar, es un sudado con un atamalado, donde el pescado se sirve entrero o de trozos de Mero con hueso.
Si bien la carta no es extensa, cuenta con opciones representativas, bien pensadas y ejecutadas, donde la sazón de De Sanctis emana un sabor a hogar y cierta nostalgia. Otras tres opciones. La primera, el majarisco, que es un plato que goza de popularidad fuera de Piura y aquí evoca perfectamente a los norteños, con su plátano verde “majao”, aderezado con sofrito criollo, chica de jora y culantro fresco. La segunda, arroz con pato, donde la carne es cocida en cerveza negra y chicha de jora, y por último, el arroz con mariscos que aseguran que es “como el de Máncora”.
A los postres los llaman “purita alegría”. No dejen de probar la crema volteada con algarrobina y el tridente heladero con versiones artesanales de tres sabores donde se destacan el mango criollo y el coco.
La Picantería Alegría abrió hace menos de tres meses. Su ubicación, la propuesta, la presencia del chef De Sanctis lo colocan entre los lugares de moda, donde las recomendaciones son reservar e ir con hambre porque se antojará de probarlo todo.
Dirección: Alcanfores 715, Miraflores
Horario: Domingo y lunes de 12m a 5pm / martes a sábado de 12m a 10:30pm.
