Celebraciones marcaron la apertura de una nueva ampliación de la Bodegas Faustino en Oyón, Rioja Alavesa, España. La cuarta generación de la familia Martínez Zabala -propietaria de Bodegas Faustino-, encargó a Foster + Partners, una de las firmas de arquitectos más reconocida del Reino Unido, el diseño de una importante ampliación y renovación de las instalaciones de la bodega, así como el proyecto de un nuevo centro de visitantes, que ha sido diseñado como un edificio “Planet 1.0”.
Norman Foster, fundador y presidente ejecutivo de Foster + Partners, mencionó: “Nuestra valiosa relación con la familia Martínez Zabala se remonta a las últimas dos décadas cuando trabajamos juntos por primera vez en Bodegas Portia en 2010. El nuevo proyecto en Oyón entrelaza todo el sitio con intervenciones discretas y sostenibles a los edificios y el paisaje existentes, y un nuevo centro de visitantes que proporciona un nuevo enfoque social e imagen para la bodega con una experiencia inmersiva para todos.”
Nuevo centro de visitantes “Planet 1.0”
El diseño reinterpreta la bodega en su conjunto y crea una conexión más fuerte entre las cavas existentes y el viñedo circundante. La entrada principal se ha reubicado al norte del sitio para crear una nueva experiencia para los visitantes, haciendo del viñedo lo primero que encuentran los visitantes en su recorrido: una serie de experiencias únicas en las que el vino, el viñedo, la naturaleza, la arquitectura, la cultura y la sostenibilidad se entrelazan.
Un camino conduce al nuevo centro de visitantes, el protagonista del proyecto. Está diseñado como un salón abovedado y sin columnas para crear un volumen espacioso y flexible. El techo abovedado se inspira en el patrimonio industrial de la bodega, reinterpretado como una estructura ligera hecha de arcos de madera. El perfil anti-funcular mejora el rendimiento estructural con materiales mínimos, mientras que su paleta de colores terrosos permite que el edificio se integre perfectamente con el paisaje.
El nuevo centro de visitantes está designado como un edificio “Planet 1.0”, ya que sus emisiones de carbono pueden ser fácilmente absorbidas por la cobertura verde de la Tierra, lo que lo convierte en un verdadero ejemplo de sostenibilidad. El edificio también adopta una estrategia de Energía Plus, liderada por los paneles fotovoltaicos en el techo que producen más energía de la que se requiere para las operaciones del edificio. La energía excedente se desvía a los edificios existentes de la bodega. El edificio cuenta con grandes voladizos en los cuatro lados para reducir la ganancia de calor del sol, difuminando las fronteras entre el interior y el exterior. Un tragaluz central y fachadas de vidrio cuidadosamente integradas traen luz natural a los espacios interiores, reduciendo la necesidad de iluminación artificial.
El nuevo paisaje también se mezcla con las instalaciones existentes del sitio, que, en conjunto con la reubicación de los muelles de carga y la estación de control durante la cosecha, ha mejorado significativamente la eficiencia operativa. Además, se ha añadido vegetación a las fachadas de los edificios existentes para proporcionar protección natural contra el sol de verano, reduciendo aún más el consumo de energía en todo el sitio. El resultado es un diseño eficiente e integrado que refuerza el compromiso de la cuarta generación de la familia Martínez Zabala con el futuro de Bodegas Faustino.
Fuente: www.archdaily.pe